Si evitar la contaminación cruzada siempre fue una cuestión de primera importancia en la limpieza profesional de ambientes, en un escenario de pandemia por coronavirus como el actual se vuelve esencial. ¿Y cómo podemos prevenirla? Como especialistas recomendamos el denominado “código de color”. Es un método sencillo y eficaz para evitar la contaminación cruzada en los espacios de trabajo.
¿En qué consiste el código de color? Es muy simple: a través de la sectorización por colores se puede diferenciar fácilmente a qué sector pertenecen las herramientas de trabajo. De esta forma se previene el transporte de gérmenes, bacterias y microbios de un lugar a otro. Este tipo de método ayuda a precaver la contaminación cruzada.
¿Y qué colores se utilizan? En rigor no existe una norma que exija la adjudicación de un color a una tarea determinada. No obstante, sí que es habitual definir los colores siguiendo un uso estandarizado de los mismos.
Podés tomar como referencia el siguiente ejemplo. Por lo general el color verde se utiliza para señalizar las zonas en dónde se manipulan alimentos y el color rojo para señalizar las zonas que conllevan un riesgo bacteriológico alto.
Ahora vamos a conocer, en más detalle, cómo utilizar el código de color que se aplican a la limpieza profesional.
Habitualmente se describe a la contaminación cruzada como el proceso por el cual los alimentos entran en contacto con sustancias ajenas, generalmente nocivas para la salud. Su potencial impacto es muy amplio. Por eso, deben prevenir sus consecuencias en la industria alimentaria, la hotelería, la gastronomía y los ámbitos sanitarios, como hospitales y clínicas.
Cómo usar el código de color para la limpieza profesional
Los siguientes son unos pequeños ejemplos de códigos de colores que es posible encontrar en el mundo industrial:
Azul: podemos distinguir en el color azul la limpieza de las superficies en general. Por ejemplo, para la limpieza de mesas, de bandejas, de sillas de un bar o de un restaurante.
Rojo: suele destinarse a la limpieza de baños, servicios, suelos y, como se dijo antes, el color rojo también se utiliza para la limpieza en donde se supone que existe un mayor riesgo bacteriológico. Esta es otra ventaja del código de color
Amarillo: este color está destinado a la desinfección de los utensilios de cocina, así como a la limpieza de baldosas y azulejos. También se utiliza para todas las áreas sanitarias de la empresa.
Verde: el verde se suele reservar para la manipulación de alimentos y limpieza de cocinas. También se suele utilizar el color verde para la limpieza de quirófanos y hospitales.
Blanco: para cualquier otro tipo de limpieza en general.
Negro: con este color están designados los lugares exteriores como los patios o área de carga.
En Bodemmam Distribuciones hace varios años que aplicamos la técnica del código de color para la limpieza profesional, con excelentes resultados. Por eso recomendamos el equipamiento de Royco a aquellos que necesiten separar la limpieza por áreas de trabajo. Por ejemplo, es ideal para la higiene sectorizada en la Industria Alimentaria, Hotelería, Gastronomía, Hospitalaria, entre otros.